Gazpacho se ha ganado un lugar en la escena rockera nacional a base de trabajo constante.
Pablo Oliva, Nando Cáliz y Facundo Pereyra le cuentan a 10musica de qué va este tercer álbum. 19.05.2008 A pesar de no contar con una presencia mediática considerable, Gazpacho igualmente se las ha ingeniado para hacerse de un lugar dentro de la escena nacional gracias a sus constantes giras por Capital y el interior del país, lo que les ha deparado un público entusiasta y muy fiel. Irrumpieron discográficamente en 2002 y su tema “A pleno” tuvo sus “quince minutos de fama warholiana” hasta que, de pronto, poco y nada se supo de ellos. En 2006 volvieron a dar señales de vida con Tendrías que escuchar, su segunda producción que les permitió dar sus primeros pasos por Latinoamérica, al tiempo que desarrollaron una interesante performance en materia de videoclips, todos dueños de una cuidada confección bajo la dirección de destacados realizadores.
Contratado por el sello EMI después de manejarse de modo independiente, este año el quinteto asciende un importante peldaño en su carrera con el lanzamiento de En el aire, su tercer álbum que se presentó el jueves 15 de mayo en La Trastienda.
Lejos de la dispersión imperante en sus dos trabajos anteriores, Gazpacho parece haber encontrado la brújula que le señala el puerto donde recalar. Bajo una sonoridad densa, oscura y bien rockera, los doce tracks que lo componen oscilan entre el rock pop y los medios tiempos, y si bien por momentos remiten al U2 de la época de Achtung Baby, se nota una franca evolución y una coherencia a la que sólo se accede después de mucha prueba y error y cierto grado de madurez. Pablo Oliva (voz), Nando Cáliz (guitarra) y Facundo Pereyra (bajo), entre otros temas, desmitificaron frente al grabador de 10Música la condición fronteriza que se le suele adjudicar a todo tercer disco de una banda.
¿Cuál fue el concepto musical que quisieron plasmar en este tercer disco?
Nando Cáliz: La premisa para este disco fue la simpleza. No quisimos volvernos locos regrabando tres mil instrumentos o utilizando efectos estrambóticos.
Pablo Oliva: Es un disco en el que las canciones fluyen; podés escucharlo entero sin necesidad de saltearte temas porque creo que, por fin, logramos una coherencia entre todo el material. Es un álbum, no un rejunte de temas. Además, al ser nuestro primer disco para una compañía importante como EMI, tuvimos mucho tiempo para grabarlo y nos concentramos sólo en la música. Antes, como independientes, teníamos que estar a cargo de todos los detalles, incluso los no musicales y eso te dispersa.
¿Creen que En el aire es el álbum que los consolida como grupo y en el que mejor pudieron exponer sus ideas?
P.O: Creo que todos sentimos mucho eso. Quizás para el primer disco nos juntamos y las ideas grabadas ya venían de antes; para el segundo también quisimos explorar mucho y, por ahí, nos fuimos de mambo y perdimos el rumbo.
Creo que este tercer álbum es un gran paso en la búsqueda de un sonido propio, algo que se logra después de haber tocado mucho en vivo. Aunque la gente no lo sepa o no se difunda mucho en los medios, somos de recorrer mucho el interior. Vivimos tocando y eso se notó a la hora de entrar al estudio. Ahora todos sabemos adonde apuntamos.
¿De dónde surge esa atmósfera sombría que envuelve a la mayoría de las letras y se extiende al arte del disco?
N.C: Sí, es verdad. En nuestras letras siempre hay una cuota de nostalgia dando vueltas. No creo que todas lleguen a la tristeza; son más bien melancólicas. Aunque, como decimos en “Espérame”, siempre hay un luz al final del túnel.
Todo lo que esperás al final llega. Y en ese contexto el cover de “Parasiempre” de Héroes del Silencio cae como anillo al dedo…
Facundo Pereyra: Muchas veces en la vida pasan cosas que no tienen explicación.
Grabar este cover nos acercó a Héroes del Silencio.
Muchas veces nos dijeron que nuestra música era parecida a la de ellos y, en realidad, nosotros jamás los habíamos escuchado. Ni siquiera los conocíamos.
Desde que nos acercamos a su música nos parecieron fantásticos, en especial “Parasiempre” cuya letra es buenísima.
Es la primera vez que incluimos un cover.
¿Por qué decidieron volver a trabajar con el productor Sebastián Perkal como en el disco anterior?
F.P.: Porque preferimos depositar nuestro audio en alguien que nos conoce desde hace muchos años y en el que confiamos plenamente. También porque posee la independencia necesaria para decirnos con autoridad cuando estamos metiendo la gamba. Por otro lado, como era nuestro primer disco para EMI, decidimos trabajar con alguien que sabía el color que queríamos para nuestra música y conocía el momento por el que estábamos atravesando.
¿Qué los impulsó a grabar este álbum para una compañía multinacional como EMI después de manejarse siempre de manera independiente?
P.O.: Vivir de la música en Argentina es muy difícil. Te diría que casi imposible. Como independientes llegó un momento en que ya no teníamos más para invertir y surgió el interrogante:
¿Qué hacemos? ¿Buscamos una compañía o todo termina acá? Recibimos algunas ofertas que no nos conformaron hasta que llegamos a EMI, quienes no sólo editaron este tercer disco sino que compraron los dos anteriores, demostrando que estaban interesados en toda nuestra obra. Ese respaldo fue fundamental para trabajar con total tranquilidad y sin presiones.
Es la diferencia entre los que te respetan como artista y los que te ven sólo como un producto. Entre las ofertas que rechazamos hubo una que nos pedían sonar como Maná (risas). Muchas gracias pero de ninguna manera. Nosotros tenemos nuestra propia personalidad y creemos en nuestras canciones.
No nos interesa imitar a nadie.
¿Creen en aquello que dice que para toda banda el tercer disco tiene un carácter definitorio? P.O: Sinceramente estamos muy orgullosos del disco que grabamos pero, por otro lado, tratamos de no presionarnos. Somos conscientes de que somos músicos y es lo único que sabemos hacer; es lo que nos gusta y lo tomamos como un paso importante en nuestra carrera. Aunque sabemos también que es un escalón más en una historia que no se detiene.
Nos vaya bien o mal con este disco, vamos a seguir en la música. Así que en ese sentido, nos sentimos muy relajados porque sabemos que logramos un gran trabajo.
F.P.: Lo más interesante de una banda es encontrar su identidad. A vos te pueden gustar o no U2 o Los Fabulosos Cadillacs, por ejemplo, pero ponés play y sabés de qué banda se trata. Lograr tu propio sonido te lleva varios discos, muchos más que tres. Aunque creo que nosotros vamos por el buen camino.
Tomada de la pagina de 10musica.com